Escritos en Nicaragua presenta a |
En todo encuentro erótico hay un personaje invisible y siempre activo: la imaginación. Octavio Paz |
Mi novia Mi novia que aún no conozco espera hacerme el amor cuando el reloj vomite doce veces. |
Madrugada Poseo el exquisito vicio de enamorarme en cada atardecer para evitar ver por el cerrojo al demonio que camina desnudo y de puntillas en cada madrugada. |
Adúltera Vienes tú me pides un verso sin saber que es en tus muslos que escribo mejor. |
Serpientes En la madrugada, frotándonos desnudos nos convertimos en atontadas serpientes que confusas en sus retorcidas pieles se vuelven eternas. |
Medusa de Wynwood Suaves serpientes de deseos chupan mis dedos. Abro mis ojos tengo sed y recibo un beso eras tú y no puedo moverme. |
La bella chica del restaurante me incitó a amar a la fugitiva directora de arte escondida detrás de su libreta de órdenes de esa tarde a descubrir que nuestras lenguas y acentos no eran más que nubes y recordar que escribo poemas con mis manos temblorosas y cansadas. Dedicado a W.T. |
Motel de Biscayne Boulevard Cuerpos bajo cobijas de tibios sudores expelen los últimos gemidos. Un gendarme aqueja el término de las dos horas |



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