martes, 20 de mayo de 2025

La sensorialidad

Escritos en Nicaragua

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La Sensorialidad

Después de las descripciones y los diálogos existe algo tan o igual de difícil de redactar tanto en los relatos y novelas: la sensorialidad. Esto que implica darle vida a los personajes dentro de su escenario, activando algunos de sus cinco sentidos. Si nuestros protagonistas están en un bosque oscuro, hay ponerlos a correr, escuchar su respiración agitada, el sonido de sus pasos sobre la maleza o sobre ramas u hojarasca; si están en el mar, hay que saber que hay calor, que los cuerpos empezarán a sudar, que los personajes se quejarán del bochorno, y la arena y el mar de vez en cuando servirá de motivo de conversación, porque por algo ellos decidieron estar en la playa. Ejemplos y escenarios hay por toneladas.
Digo que es difícil porque los autores olvidan qué están haciendo los personajes dentro de ese escenario, si es de día o de noche, si los personajes caminan o están sentados, si tropiezan o se detienen a amarrarse los cordones, si van en un auto y pasan sobre un bache.

Es muy común que en algunos relatos los personajes estén en la cantina, pero olvidan que están ahí, les hace falta el ruido de la música de fondo, el momento en que los personajes empezaron a tomar, el sabor del primer trago o el del limón, si sorben de vez en cuando su cerveza, pareciera que los personajes están dentro de una caja gigante, no hay ruido ni adentro ni que provenga de afuera, y zas, acaba el relato, terminaron su botella que nunca supimos que la empezaron a tomar.

Es bueno pensar en los escenarios y que la narración y los diálogos fluyan con naturalidad, pero no hay que olvidar que si ubicamos a los personajes dentro de cierto escenario (espacio abierto: ciudad, playa, bosque; semi abierto: casa, café, cantina, bar; cerrado: cueva, cuarto, etcétera) éste influya en los personajes, lo sensorial debe estar presente, los cinco sentidos están disponibles para jueguen un papel dentro de ese momento narrativo.
La temperatura, los sabores, los olores, la textura son parte de esa sensorialidad y deben estar presentes determinada su función dentro del ambiente en el que ellos se desarrollen.

La próxima vez que leamos un capítulo de una novela o un relato veamos cuánta sensorialidad ocupó el escritor para darle vida a los personajes y su alrededor, quien quita y notemos que dejó a los personajes ausentes de sus sentidos, personajes insípidos que su función sólo fue dialogar y desaparecer, como si los dialogantes lo hicieran dentro de un espacio oscuro en el que sólo sus voces les dan vida a sus personajes.


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Escritos en Nicaragua

5 comentarios:

Noé Palacios dijo...

Soy un crítico tóxico, avinagrado y por eso razón no suelo comentar las obras de otros escritores. Pero hoy haré una excepción.

El artículo que Maynor publicó hoy en Escritos en Nicaragua una auténtica cátedra. Lo que más me gustó es que supo expresar los conceptos sin recurrir a citas de obra literaria alguna.

Personalmente espero que sigás publicando artículos sobre edición literaria con el mismo espíritu del de hoy.

Anónimo dijo...

Mi comentario: Una vez un grupo de personas quisieron influir ante la fundación "premio nobel" para que le otorgaran el galardón de literatura a un escritor "X", y la fundación dijo que no atendía sugerencias de nadie, porque ellos ,los suecos, vivían aislados por su ubicación geográfica, y que su dinero era de ellos, y que ellos otorgaban el galardón a quien ellos quisieran. No obstante, una vez se dejaron influir y otorgaron el premio nobel de literatura a alguien que ni siquiera podía estructurar diálogos, por lo tanto no le podía infligir la sensorialidad organoléptica a los personajes, como acota Maynor.
Una vez le preguntaron a Albert Einstein: ¿Por qué costó que te dieran el premio nobel? y él respondió: porque el jurado no sabía de física.
Bye, Bye!



Enrique Granados dijo...

Excelente lección de Maynor, aprecié lo sencillo para llegar con su mensaje. De acuerdo, lo sensorial es dificil, aveces el escritor olvida que el escenario y sus personajes ubican e introducen al lector en la historia.

Anónimo dijo...

Muy interesante su aporte. En verdad aprecio en sumo grado la sensorialidad en la literatura. Quien no recuerda por ejemplo el inicio de "El Amor en tiempos del colera" describiendo el olor a almendras amargas en el escenario de suidicio de Jeremias de Saint Amour ? o la referencia a la sensacion pegajosa del sudor en los cuerpos fragiles cuyos huesos se fracturaban en el fragor del sexo en " Cien anios de soledad", o la sensacion de aridez y calor en "El Llano en llamas" ? La sensorialidad es uno de los recursos mas afortunados para transmitir al lector todo contexto en que se desarrolla la obra. Gracias Maynor.

Anónimo dijo...

Los libros de Gabriel García Márquez, están llenos de sencioralidad. Por eso los disfruto tanto, por qué te hace sentir los olores, la lluvia, el calor, en l sexo...